Mandalas, una reflexión para el alma

¡Hola! hoy me apetece hablaros sobre los mandalas, ya que durante el confinamiento por el covid-19  le estoy dedicando más tiempo. Realmente he hecho apenas unos cuantos mandalas propios, llevo años coloreándolos pero nunca se me pasó por la cabeza crearlos yo misma, entre otras cosas porque mis dotes artísticas no son precisamente lo mío, nunca había dibujado nada, bueno sí, pero nada realmente que mereciera la pena...digamos que mi hija de 6 años dibuja mejor que yo 😂

Si aún no sabes lo que son los mandalas, no te preocupes, sigue leyendo... Yo misma lo descubrí hace no muchos años. Aunque los mandalas son muy antiguos, en Occidente se descubrieron mucho más tarde y ahora podemos ver mandalas por todas partes, se han puesto de moda con diversos fines, principalmente el de la relajación. Se trata de una serie de dibujos con forma circular que simbolizan el cosmos y el microcosmos y que tienen su origen en la filosofía budista. La palabra "mandala" viene del sánscrito, que significa "círculo sagrado".

Los mandalas tienen muchos beneficios, fomentan la creatividad y relajación de la mente, ya que al concentrarnos en el dibujo entramos en una especie de meditación profunda, estamos en el momento presente, en el aquí y el ahora, un lugar donde la mente descansa de los ruidos mentales. Pero los mandalas son mucho más que simples dibujos, pues tienen un sentido espiritual, basados en la búsqueda de un equilibrio energético y una transformación personal. A través de sus colores y formas geométricas hacemos que nuestro inconsciente se exprese, de manera que sirve como terapia para sanar emociones, bloqueos, traumas o cualquier otra cosa que se encuentre en nuestro subconsciente y que necesite ser sanado, pero también funciona con nuestro consciente, si te sientes triste o enfadado, prueba a colorear o dibujar un mandala, te ayudará a expresar tus emociones, de esa manera evitarás que se produzca un bloqueo en tu cuerpo físico. Lo bueno es que no necesitas saber qué es lo que estás sanando, solo entregate y disfruta del cambio.
En definitiva, los mandalas te permiten reconectar con tu esencia divina, es la expresión del alma por excelencia.

Existen 3 formas para trabajar con mandalas:

1. Mediante observación: solo necesitas buscar un lugar tranquilo, sentarte en una postura cómoda, comenzar a respirar de manera rítmica y profunda y observar algún mandala que sea de tu agrado. Solo con el hecho de observar las formas, símbolos y colores de un mandala podemos entrar en estado de meditación profunda. El tiempo de meditación con un mandala suele ser entre 3 y 5 minutos, pero será lo que realmente necesites, dejate guiar por tu intuición.

2. Coloración: Si nunca antes has tenido contacto con los mandalas, ésta quizás es la mejor opción, puedes comenzar por colorear un mandala que te llame la atención. Cuando elegimos un mandala para colorear o para meditar con él, es el alma la que hace la elección, no nosotros. Es tu alma la que realmente sabe lo que necesitas sanar en ese momento. El simple hecho de colorear mandalas ya tiene un efecto terapéutico, ya que los colores también juegan un papel fundamental para sanar emociones o traumas del subconsciente. Cuando eliges un color ocurre lo mismo que cuando eliges un mandala, tu alma es la que pone de manifiesto la necesidad de sanar ciertas emociones que están en tu subconsciente y que tu ni siquiera conoces.

3. Dibujar tu propio mandala: esto es lo ideal, desde mi punto de vista es el método más completo, puesto que fomentamos nuestra creatividad y trabajamos con las formas geométricas y los colores. Es la expresión de nuestra alma. Todo aquello que necesita sanar, aquello que está enquistado sale como por arte de magia, porque realmente es un momento mágico, conectas con tu yo verdadero, te van viniendo ideas y formas a tu cabeza, y cuando te das cuenta has creado un precioso mandala.

Como decíamos, el color es una de las partes fundamentales de los mandalas y cada uno tiene un significado diferente:

- Blanco: simboliza la pureza, la inocencia, la simplicidad. También significa longevidad y optimismo.
- Negro: tiene una simbología tanto positiva como negativa, refleja misterio,profundidad, receptividad, silencio, independencia y poder. Pero también tristeza, desánimo y sobriedad.
- Marrón: este color refleja estabilidad y firmeza.
- Azul: este es el color de la paz y tranquilidad. El azul transmite serenidad, verdad, armonía, progreso, fidelidad, contemplación y libertad. Aunque también tiene una connotación negativa, refleja soledad, seriedad y frialdad.
- Verde: simboliza la esperanza, el equilibrio, la naturaleza, el crecimiento, rejuvenecimiento y estabilidad.
- Amarillo: es el color de la alegría y el optimismo. Transmite energía, felicidad,diversión, inteligencia e innovación.
- Rosa: es el color de la dulzura y la delicadeza. Refleja sensibilidad, gratitud, amistad, calma, exquisitez y buen humor.
- Rojo: es el color de la vida y la energía pura. Refleja valor, fuerza, energía, pasión, sensualidad, impulsividad, deseo, sexualidad. Aunque también ira, enfado, rabia, peligro y hace referencia a lo prohibido.
- Morado: es el color de lo espiritual. Simboliza misticismo, sensualidad y poder, pero también autoridad y manipulación.
- Gris: este color simboliza lo formal, la seriedad, la elegancia, el orden.Aunque también lo sombrío y la tenacidad.
- Naranja: es el color de la creatividad, el optimismo, la calidez y el entusiasmo. Además transmite salud, movimiento, fraternidad, vitalidad y éxito.

Espero que os haya gustado este post sobre los mandalas y sobretodo que lo pongáis en práctica, ya sabes... si necesitas expresar  tus emociones o liberarte de las energías negativas, pon un mandala en tu vida. ;)

Os dejo con algunos de mis mandalas más especiales, ya que son canalizados, el primero lo canalicé la semana pasada, está inspirado en los 7 Chakras y en la fuerza y poder del Sol, el segundo canalizado para misma y el último para mi sobrino Darío, mi gran hombrecito! 😊


Que tu luz brille siempre.
Namasté 🙏❤️